Ni siquiera se por donde empezar. Porque tal vez escribo esto para contarle a todo el que quiera leer eso que no me animo a decirle a el. Y no, no me estoy refiriendo a ninguno de los idiotas que no me valoran, ni mucho menos a ese que me gusta y no me da bola. Estoy intentando poner en palabras lo que siento por alguien que es más para mi de lo que cree.
Lo lastimé, mucho, demasiado, más de lo que me gusta pensar. Sé que sufrió por mi culpa y esa es la razon por la que no vuelvo a buscarlo, porque soy conciente que mantenerme lejos de el fue lo mejor que pude haber hecho, salvarlo de mi y de mis dudas y miedos.
Pero eso no impide quererlo, ni extrañarlo. Extrañar sus abrazos, sus palabras de consuelo ni su increible forma de hacerme sentir segura en cualquier lugar. La estabilidad que me brindaba, la paz y el amor que sentia cuando lo tenia cerca.
Que sea el unico que fui capaz de presentar en mi casa, ante mis papás, que sea el unico con el que quiero pasar mil tardes de nada, mil tardes de estar. Meriendas en cafeterias caretas, y peliculas en el cine de muy bajo presupuesto. Salidas a comer a tenedores libres y que no me de verguenza comer hasta explotar enfrente de el. Caerme por tener tacos o reirme a carcajadas (con la risa poco femenina que tengo).
Que me conozca de todas las formas habidas y por haber, y conocerlo tambien en su mejor y su peor momento. Saber que lo hace enojar, y que lo hace inmesamente feliz.
Sus gustos, sus formas y sus reacciones. Conocer todo. Tal vez por eso lo extraño, nosotros estabamos bien. Tenia estabilidad y amor, incondicional. Y tal vez tambien por eso no quiero hacer "cosas de novios" con nadie más, porque solo funcionaron con el.
Y no me animo a salir corriendo a buscarlo. Porque tambien sé lo bueno que es, y lo mala que fui. Sé que el más que nadie se merece ser feliz, y yo no me creo capaz de hacerlo feliz. ¿Como hago? Digo, como hago para convencerme de que lo que hice hasta ahora es lo correcto: desaparecer de su vida.
Tengo tantas ganas de estar bien con alguien que cuando me lo pongo a pensar solo me sale su nombre. Tengo ganas de volver atrás y valorar eso que perdí. Tengo ganas de estar abrazada a alguien toda la tarde, tener alguien para contarle todo eso que me atormenta, quiero alguien que me tranquilice y quiero alguien que me cuide. ¡Y el hacia todo eso tan bien! A donde, me pregunto. A donde quiero llegar.
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