martes, 23 de diciembre de 2014

Supe que era casada con problemas de pareja

Nos rendimos los dos a fingir como tontos, que yo era su marido y que ella era mi mujer. Pero al cabo de tiempo yo no quería ser su esposo, y ella quiso volver a ser la dama infiel. 

Ahora ella esta feliz, volvió con el idiota. 
Yo recorro las calles buscando otra mujer, y aprendí mentirse tiene patas muy cortas. 
Que siempre la costumbre va a matar (le va a ganar) al placer.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario