"Para evitar el sufrimiento se debe no amar. Pero entonces se sufre por no amar. Luego, amar es sufrir, y no amar es sufrir. Sufrir es sufrir. Ser feliz es amar. Ser feliz por tanto, es sufrir. Así, para no ser feliz, se debe no amar, o amar para sufrir o sufrir de demasiada felicidad"
Sufrir de demasiada felicidad. Yo ya no distingo diferencias. ¿Estoy mejor sin el? ¿Estaba peor cuando el estaba? Todo es mierda. Es un todo oscuro del que intento, pero no logro salir. Cuando el estaba por lo menos tenia instantes de felicidad, ahora es una monotonía lisa y constante. Supongo que eso era un poco lo que me gusta de el, su inestabilidad. Un día arriba y al siguiente en lo mas bajo que existe. Ya no tengo noches de llanto ni sufrimiento absoluto como me pasaba cuando estaba con el. Pero tampoco tengo esos picos de felicidad, en los que parecía que estaba tocando un glorioso cielo, en los que podía asegurar estar abrazando el cielo. Ahora todo lo que tengo es nada. Una nada que me envuelve, y que no me deja escapar.
"Porque estoy bien sin el. Pero con el estoy mejor" (aunque a veces sufra, porque después de todo, eso es amar, amar es sufrir. Y yo lo amo)
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