sábado, 11 de enero de 2020

Respuestas

   Lo malo de las lecturas akayikas es que casi siempre me dicen eso que yo ya sabía, pero me negaba a ver. A veces reniego muchísimo de mi condición de bruja, pero al día de hoy cada una de las premoniciones que tuve se cumplieron. Cada presentimiento, cada sensación e intuición. Debería hacerme más caso a mi misma, quizá así no terminaría tan enredada en problemas mundanos y terrenales. 
  Quizá esta es una nueva oportunidad de reencontrarme. De respirar hondo, llorar lo necesario, dedicarle mucho tiempo a mi energía y propia sanación y salir adelante. Como siempre hago, como siempre hice. Como cada vez que sentí el mundo cayendo a pedazos en mi espalda. Sé que voy a estar bien. Me lo dijeron en las lecturas, pero de alguna forma ya lo sabía, porque siempre sé que puedo con todo. La vida me golpeó tantas veces que ya casi nada me asusta, y sé que de todo se sale... pero me niego a hacerlo en realidad. 
  Tuve cuatro días espantosos, contando el de hoy. Me reí de a ratos mientras mis amigos se esforzaban por distraerme, pero llegando a casa, en la ducha, mientras dormía y hasta en mis sueños lloré. Lloré muchísimo para solo cuatro días, lloré como nunca en mi vida. Lloro escribiendo esto, sabiendo que una vez que le ponga palabras y salga de mí, probablemente sea definitivo para mi cabeza. 
  Pensé muchísimo en si debía escribir o no, porque pienso mucho y a cada rato si tengo que decirte lo que siento, o debo guardármelo para respetar tu espacio y la distancia que decidiste tomar. La verdad es que si no escribo voy a explotar, si no me expreso de alguna forma siento que no voy a poder con el dolor que cargo así que sólo espero que si estás leyendo esto, pero no querés saber de mí, o de lo que me dijeron en las lecturas sobre nuestro futuro, te detengas ya. Quizá no es sano que sepas de mí, no te ayuda en nada saber como me siento o por lo que estoy pasando. Tal vez es mejor que por un tiempo hagamos como si el otro se hubiera esfumado. 

Y hoy se me pasa la vida imaginando que vuelves a pasarte por aquí.

 Si no dejaste de leer para esta altura, ya es tu problema. 
 Me dijeron tantas cosas que todavía estoy digiriendo. Triángulos amorosos sobre vidas pasadas, que vaya a terapia, que me concentre en mí, que escriba, que lea, que llore si lo necesito, que respete mis tiempos y lo que siento. Que más que nunca aprendí a sentir, a dejar ser lo que me está pasando, a no reprimirme y a dejarme ser. Y que tengo que aprovecharme de eso, respetando que si algún día no quiero salir de la cama, y solo quiero llorar... esta bien. Que si no quiero ir a ese viaje que me costó casi 30 mil pesos, también está bien. 
  Hoy lloré todo el día pensando en que no quiero ir. Me quiero quedar en mi casa, en mi casa, quiero llorar hasta vaciarme y estar muy muy quieta para no romperme aún más. Pero el mundo sigue y creo que si puedo respetar al menos quedarme acostada cuando así lo sienta, y llorar mirando un mar hermoso, es lo que voy a hacer. 
 Sigo pensando todavía si quiero quedarme después de vacaciones con mis papás. Quizá porque un tiempo sola, con la casa entera para mí me vendría muy bien. Aunque un poco le temo a mi soledad, a que no haya alguien obligándome a comer, y a desaparecer en mi propio abismo. 
 Pero todo es temporal, me dijeron que voy a estar bien, que más allá del dolor que siento hoy, más tarde, algún día voy a despertarme mejor, con el aprendizaje de esta perdida a cuestas y viendo el futuro con mejor cara. Me dijeron que esta ruptura marcó una antes y un después en mi vida, que escriba, que escriba sobre todo lo que siento porque posiblemente todo acabe siendo un gran libro. Que sí, que quizá irme a vivir lejos a donde quiero es lo correcto y que será una experiencia llena de aprendizajes. Que voy a conocer a muchas personas que me van a enriquecer en muchos sentidos. Y que voy a ser feliz. 
  Y acá viene la parte más dolorosa: pregunté por nosotros. ¿A quien quiero engañar? Toda la lectura fueron preguntas sobre nosotros. Me dijeron que me niego a ver el final de nuestra relación, y no se equivocan. Sigo sintiendo que nuestro futuro es juntos, y que pese a todo te amo incondicionalmente. Y quizá ese fue mi error, yo te amé y te amo siempre humano, con todo lo que sos, con todo lo que puedas ser, con eso que quizá no me guste tanto. Y me duele un poco que vos no pudieras con mi oscuridad, que no me aceptaras a pesar de mis errores y que te alejaras. Aunque te sigo amando incondicionalmente, asi que no te juzgo. Hoy cuando me decía que estabas enojado, y dolido, como un viejito cascarrabias, yo lloré mucho porque sé que es real, que seguramente estés así. Porque te amo hasta enojado, y porque esperaría la vida entera a que el enojo, el dolor, a decepción se te pasara y me vieras humana, real, con errores, y me amaras así. 
  Sé que me amas un montón, porque también me lo dijeron. Y cuando pregunté si vamos a volver algún día me dijeron... bueno es difícil de explicar. Básicamente cosas que yo ya sé, que tus tiempos son más lentos que los míos, que vas a tardar varios meses en asimilar todo lo sucedido y decidir si querés volver a buscarme o no. Y que quizá lo hagas, pero que lo más probable es que para ese momento yo ya haya conocido a alguien. Porque eso también parece ser parte de mi futuro, en cuanto asuma que lo nuestro se terminó, alguien va a aparecer. Y yo tiendo a hacer mis procesos rápido y en cuanto decido que algo es definitivo... por eso es que estoy negada. Quiero que vuelvas ya, rápido, lo antes posible. Quiero solucionarlo y verte sonreír cuando me veas otra vez. No quiero ponerme en plan de "superarlo" porque ¿y si volves? ¿y si para cuando vuelvas yo ya lo superé y dejamos ir la mejor relación del mundo? 
  Yo estoy segura de que nos amamos tanto que todo el dolor puede sanar. Pero el tiempo que pasa lento y constante es mi enemigo, y para cuando me dé cuenta quizá todo haya pasado sin siquiera verlo pasar. 
  
  Hoy me estoy empezando a elegir a mí. Contraté Spotify premium para descargar las playlist necesarias para llorar, me llevo mis libros, mis cuadernos para escribir... también el ukelele. Me llevo todo lo necesario para sentirme a salvo. No bien, tampoco mejor. Simplemente para sentirme. Para que la buena música y la escritura me ayuden a re descubrirme otra vez sola. Con esa soledad que siempre amé y disfruté. Quiero disfrutarme, disfrutar de como me siento aunque sea tristeza. Aprender de mí, de lo que me estoy dando a mi misma. Aprender de mis errores y no repetirlos, ver más allá del dolor que siento para proyectarme a algo positivo. 
  Y solo deseo que lo que nos espera en el futuro sea amor. Amor adulto, humano, sincero. Repleto de errores pero constante y fuerte. Y si no es con vos, si me toca dejarte ir para siempre aunque se me parta en dos el alma, espero que ese tipo de amor pueda sentirlo por mí misma. Y amarme incondicionalmente como lo hice con vos, aceptarme y quererme humana, perdonarme los errores y aprender de lo que mi oscuridad viene a enseñarme. Ser mejor por mí, para mí. Y por si algún día volves, para compartir mi amor propio nuevamente con vos. 

 Siempre te extraño, y siempre te espero. 
 También siempre te amo. 
 Porque siempre es siempre, no importa donde, ni en que momento. 
 Por siempre mi lugar seguro, y mi mejor compañero. 
 Ojalá lo que nos encuentre en el futuro sea amor. 


No hay comentarios.:

Publicar un comentario