Te extraño.
Pero me hago la tonta y no le digo a nadie, no quiero que me vean llorar.
Me haces falta.
Pero ni loca lo digo en voz alta, porque me derrumbaría y la verdad es que necesito seguir siendo fuerte. O al menos mostrarme fuerte.
Te extraño con cada fibra de mi ser y no quiero aceptarlo. No quiero que nadie sepa que todavía me duele después de tanto. La verdad es que me hago la desapegada pero siempre me costaron bastante las perdidas. Me cuesta dejar ir, aunque por fuera parezca que ya lo hice. Extraño verte sonreír, que me levantes del piso en un abrazo y que me digas que soy hermosa. Que estás orgulloso, que me amas, que me amas tanto que soy la hija que nunca tuviste.
Te extraño con cada centímetro de mi piel y no me di cuenta hasta hoy. Hoy que por primera vez te estoy llorando. Tardé dos años. Perdón pero es que antes no pude, te juro que no. Todos me necesitaban tanto, todos se apoyaban tanto en mí que... que yo sólo pude dedicarme a ser el pilar que sostuviera todo. Es lo que mejor me sale, dejarme de lado por los demás. Y hoy que tengo este ratito para mí, y para vos, y para llorar lo que no lloré en todo este tiempo, sólo quiero volver a cualquiera de mis cumpleaños o a cualquiera de todas las vacaciones en sancle y abrazarte fuerte muy fuerte. Que me compres tres docenas de churros sólo porque sabes que me encantan y me dejes estar sentada al lado tuyo mientras cocinas, estás en la compu o miras el mar. Me encantaría estar al lado tuyo un ratito mirando el mar.
Sólo quiero que me mantengas fuerte, yo sé que vos estás bien, sé que era lo mejor, pero no puedo evitar extrañarte. Así que por favor manteneme firme. El mundo es duro y se pone peor si no tenes donde apoyarte. Te amo siempre.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario